sábado, 14 de diciembre de 2013

¿Dónde estás?

No sé quién eres, pero sé que no puedo dejar de pensar en ti. Pienso en la maravillosa vida que pasaremos juntos y te busco día tras día en cada rostro, en cada rincón de cada lugar que visito. Estoy cansado de desengañarme constantemente... Creo verte en unos ojos preciosos, o en una bella sonrisa, pero nunca eres tú. No ceso de buscarte, y me gusta pensar que tú me estás buscando a mí y que algún día nos encontraremos, pero nadie sabe cuándo será eso, ni dónde.
Deseo viajar, moverme por el mundo y buscarte dondequiera que estés.
No sé de qué color es tu pelo, pero sé que me encantará enredar mis dedos en él.
Ignoro de qué color son tus ojos, pero estoy convencido de que serán lo más bonito que podré ver cada mañana al despertar a tu lado.
No sé cómo será tu sonrisa, pero intuyo que me enamorará la primera que me dediques.
Desconozco cómo son tus labios, pero sé que desearé decir cualquier tontería para que me calles con un beso.
No sé cuál será tu aroma, pero preveo que cuando lo huela no saldrá de mi mente, porque me recordará a ti.
He estado toda mi vida buscándote sin éxito, pero no me rendiré hasta encontrarte.
Quiero que compartamos nuestra vida juntos, quiero que me conozcas y que te enamores de mis tonterías. Quiero que mi nombre con tu voz sea el sonido más dulce de la Tierra.
Quiero sentirme tuyo y que tú sepas que lo serás todo para mí.
Sé que estás ahí, en alguna parte, y que algún día podré enseñarte este texto diciéndote: "ya entonces sabía que te encontraría".
Porque sinceramente, me niego a creer que seas solo un sueño o una ilusión. Quiero amarte y hacerte inmensamente feliz. Sé que hay muchas chicas por ahí, pero yo seguiré buscándote solo a ti. Buscaré en el fondo de tus ojos esa luz que me hará ver por qué tú eres especial.
Sueño contigo y con la vida tan feliz que tendremos, pero aunque pasen años, yo no perderé la ilusión por verte y por conocerte.
Quiero sentir tus dedos entrelazándose con los míos, y coger tu cintura mientras caminamos por la calle. ¿Dónde estás? Me vuelvo loco al no encontrarte y no quiero malgastar más tiempo sin ti.
Salgo a la calle y miro alrededor, pero nunca estás.
Quizás nuestros destinos no se crucen nunca y pasemos el resto de nuestras vidas pensando que debe haber algo más... Pero me niego a creer siquiera esa posibilidad.
Sé que existes, te necesito y prometo encontrarte. Mi vida depende de ello, porque algún día tú serás mi vida.

James Whitaker.


LETRA TRADUCIDA DE "HAVEN'T MET YOU YET"

No me sorprende,
No todo dura para siempre,
Me han roto el corazón tantas veces
Que he dejado de contar.

Me hablo a mí mismo,
Una y otra vez,
Me hago muchas ilusiones,
Y entonces me defraudo.

Trato con mucha fuerza de no volverme loco,
Me vengo a mí mismo con un millón de excusas,
Pienso constantemente en cada posibilidad.

Pero sé que un día todo cambiará,
Me harás trabajar duro para que hagamos que esto funcione,
Y te prometo, cariño, que me darás mucho más de lo que tengo,
Simplemente, no te he conocido todavía.

Quizás tenga que esperar,
Jamás me rendiré,
Supongo que la mitad lo dirá el tiempo,
y la otra mitad, la suerte.

Dondequiera que estés,
Cualquier lugar, es perfecto,
Vienes de ninguna parte,
y entras en mi vida.

Y sé que podemos ser tan increíbles,
Y nena, tu amor me cambiará la vida,
Ahora puedo ver todas las posibilidades.

 De algún modo sé que algo va a cambiar,
Me harás trabajar para que hagamos que funcione,
Y te prometo, cariño, que me darás muchísimo que no tengo,
Simplemente, no te he conocido todavía.

Dicen que la vida es justa,
Y que todo vale en el amor y la guerra.
Pero no tendré que pelear,
Juntos lo lograremos,
Y estaremos unidos.

Y sé que podemos ser tan increíbles,
Y estar en tu vida me cambiará por completo,
Ahora puedo ver todas las posibilidades.

Y algún día sé que todo cambiará,
Y me esforzaré por sacarlo adelante,
Te prometo, cariño, que me darás mucho más de lo que tengo,
de lo que tengo, de lo que tengo.

Sabes que todo cambiará por completo,
Y me harás esforzarme para que esto funcione,
Te prometo, mi vida, que me darás aquello que nunca he recibido.
Simplemente, no te he conocido todavía.

Amor, amor, amor...
Todavía no te he conocido,
Amor, amor, amor...

domingo, 8 de diciembre de 2013

Una semana inolvidable



Hola a todos,

Abrí este blog para escribir sobre mis experiencias, y en estos momentos no puedo pensar en otra cosa que no sea la experiencia tan increíble que acabo de vivir. Hace tiempo me dieron una beca para estudiar inglés durante una semana en Granada. Escogí ese destino y la semana del 2 al 6 de diciembre, y definitivamente no pude escoger mejor.
Cuando llegué allí estaba extrañamente emocionado. Me embarcaba en una nueva aventura y me adentré en una ciudad desconocida deseando ver qué me deparaba el futuro. Llegué al hotel y me avisaron de que mi compañero de habitación no había llegado todavía. Había estado preguntándome qué tipo de persona sería y si nos llevaríamos bien.
Resultó ser un tipo estupendo que rápidamente se convirtió en un gran amigo.
Cuando bajamos a cenar junto con nuestros nuevos compañeros del pasillo, ya estaba prácticamente todo el curso abajo, sentados en las mesas y cenando. Enseguida todos nos saludaron amigablemente y nos dedicaron sonrisas de bienvenida. Éramos más de treinta personas, y yo no me había esperado un grupo tan numeroso, pero me sentía cómodo. Todos eran nuevos aquel día, igual que yo, y tenía el presentimiento que algo grande estaba a punto de comenzar.
Mientras cenábamos, en nuestra mesa de 11 miembros comenzamos a hablar y conocernos un poco. Qué habíamos hecho antes de llegar allí, nuestros nombres, cómo habíamos llegado al hotel... Pequeños detalles significativos sobre nosotros que probablente (pensé con acierto) deberíamos repetir alguna que otra vez para que los demás los recordaran.
Aquella noche salimos para celebrar nuestra llegada. Fuimos a tomar algo a diversos locales, pero lo importante era la compañía. Hicimos un círculo y comenzamos a presentarnos a los que serían nuestros compañeros día y noche durante una semana. Reinaba un ambiente de emoción, ilusión y ganas por compartir cosas aquella misma noche. Noté que todos se sentían igual que yo.
A la mañana siguiente nos dieron la bienvenida al curso y nos dividieron en clases según nuestro nivel de inglés. Allí coincidí con mi compañero de habitación y con dos chicas increíbles que pronto se convertirían en buenas amigas mías.
Durante las clases reíamos con los juegos de los profesores y nos ayudó a unirnos mucho más, pero fuera de ellas era cuando todos vivíamos momentos que yo, personalmente, nunca olvidaré:
Esos momentos de complicidad pensando que nunca llegaba la hora de comer y todos deseando probar bocado, esas noches de fiesta y muy poco sueño teniendo que madrugar a la mañana siguiente, con sus consiguientes caras de zombis durante el desayuno; esas veinte o treinta veces que cantábamos el cumpleaños feliz a grito pelado, fuera el cumpleaños de alguien o no; esas caras de decepción cuando salíamos a pasear y veíamos la poca agua que llevaba el río Genil; esas pintas de guiris que teníamos durante las excursiones escuchando charlas en inglés, esas miradas soñadoras a la Sierra Nevada desde la escalera de incendios, deseando salir a conocer la ciudad mientras brillara el Sol y no únicamente de noche...
Necesitaba realmente esas "mini-vacaciones". Liberarme un poco del estrés que genera vivir en Madrid, una ciudad llena de gente y ruido. Ha sido como si esta semana todo volviese a empezar: Gente totalmente nueva en un sitio desconocido... Una experiencia única e inolvidable que recomiendo encarecidamente.
Fue realmente triste el momento de la despedida, cuando todos debíamos aceptar que aquello ya iba a terminar. No queríamos aceptarlo y volver a la "vida real".
Mientras todos íbamos de camino a casa, estábamos conectados por whatsapp, todos con pena avisando de cómo iban en su viaje de vuelta. Yo me imaginaba mentalmente un mapa de España, con un montón de puntitos acumulados en Granada, y ese día visualicé cómo los puntitos se iban dividiendo y separando, cada uno siguiendo su propio camino por tierra, mar o aire.
No pensé que fuera a encontrarme con gente tan agradable y simpática que en tan poco tiempo me haría sentir parte de algo tan grande. Nunca los olvidaré.
Ahora mismo, siento como si todo aquello hubiera sido un sueño. Fueron unos días memorables en Granada, pero ahora me encuentro en Madrid como si nada hubiese cambiado, y me siento un poco frustrado con la vida por haberme dado tanto de golpe y ahora dejarme sin nada de lo que ha sido mi rutina esta semana. Si tuviese que definir esta semana con un adjetivo, sin duda sería "intensa". Mucha gente puede pensar que una semana no da para tanto, pero les aseguraría que hay que vivir algo así para saber de qué se trata. Una cosa es segura, experiencias como estas son las que forjan la vida y el destino de cada uno, y tras esto, no volveré a ser el mismo, gracias a mis compañeros de la semana 49 del curso de inmersión en lengua inglesa de la UIMP.

James Whitaker.